“House of Sharing” y Museo de la esclavitud sexual por el ejército japonés
Museo
Tema: Esclavitud
Dirección
85 Gasaegol-gil, Toechon-myeon.
País
Corea del Sur
Ciudad
Gyeonggi-do
Continente
Asia
Tema: Esclavitud
Objeto de memoria
Recordar a las víctimas de la esclavitud sexual ejercida por el ejército japonés durante la Segunda Guerra Mundial.
Nombre o denominación institucional
"House of Sharing" - Museo de la esclavitud sexual por el ejército japonés
Fecha de creación / identificación / declaración
1992
Acceso al público
Libre

Descripción del lugar
House of Sharing (Casa del compartir) es una casa de reposo creada para las mujeres de Corea del Sur que fueron víctimas de esclavitud sexual durante la Segunda Guerra Mundial por parte del ejército japonés. Actualmente funciona el Museum of Sexual Slavery by Japanese Military (Museo de la Esclavitud Sexual por el Ejército Japonés). En el lugar se encuentra también un parque conmemorativo en el que se ubican las tumbas y bustos construidos en bronce de las mujeres que habitaron la casa.
Durante el período colonial y bélico en que Japón ocupó Asia y las islas del Pacífico (1930-1945), miles de mujeres, conocidas en el mundo como ianfu o confort women (“mujeres de consuelo”), fueron víctimas de sometimiento sexual por soldados del ejército japonés. El ochenta por ciento de las mujeres eran coreanas; el veinte restante eran chinas, filipinas, indonesias y de los Países Bajos. Muchas fueron llevadas con falsas promesas laborales. Los militares abusaron sexualmente de ellas de manera sistemática en las estaciones instaladas en Japón, Corea, Taiwán, China, Filipinas, Indonesia y Timor Oriental. A medida que la guerra se extendió hacia el Pacífico, el establecimiento de “estaciones del consuelo” aumentó. Se estima que en cada campo de batalla había al menos una estación.
Se calcula que el número de “mujeres de consuelo” oscilaba entre 50.000 y más de 200.000. Secuestro de niñas, violaciones masivas, abortos forzosos, humillaciones y todo tipo de violencia sexual ejercida sobre estas mujeres produjeron mutilaciones, muertes y suicidios.
La esclavitud sexual por parte del ejército japonés se convirtió en uno de los casos más emblemáticos de trata de personas con fines de explotación sexual durante el siglo XX.
Hasta los años noventa del siglo xx, el tema de las “mujeres de consuelo” era un tabú en la sociedad surcoreana. La ruptura tuvo lugar en el nuevo contexto internacional del final de la Guerra Fría, durante el cual los movimientos feministas desempeñaron un papel muy activo. Kim Hak-soon testificó el 14 de agosto de 1991 contando sus sufrimientos como esclava sexual del ejército japonés y fue la primera mujer que rompió el silencio. Estas mujeres se han convertido en figuras públicas en Corea, donde se les conoce como halmoni (término cariñoso para “abuela” en coreano). En junio de 1992 se fundó House of Sharing con el objetivo de cuidar a las mujeres que habían sido sometidas a esclavitud sexual por parte del ejército japonés entre 1930 y 1945. La casa ubicada en Seúl fue financiada a través de fondos recaudados por organizaciones budistas y varias organizaciones de la sociedad civil, y en 1995 se trasladó a la ciudad de Gwangju.
Desde 1990, conscientes de que el abuso se había cometido en varios países, los integrantes de House of Sharing han intentado extender su reclamo a escala mundial entrando en contacto con víctimas de los países afectados y dando conferencias en diferentes partes del mundo. En los últimos años, House of Sharing ha participado activamente en el proceso que busca incluir los archivos de las víctimas coreanas de la esclavitud sexual en el Registro de la Memoria del Mundo de la UNESCO.
Una de las actividades centrales del organismo consiste en las manifestaciones de los miércoles. En este encuentro, que desde 1992 se realiza todos los miércoles frente a la embajada de Japón, una multitud de activistas del Consejo de Corea y miembros de la sociedad civil exigen reparaciones legales y una disculpa oficial por parte del gobierno japonés.
House of Sharing cuenta con el apoyo gubernamental de Corea del Sur desde el año 2000, cuando la organización fue reconocida como un establecimiento de bienestar social para personas mayores. Desde entonces, los dirigentes políticos participan periódicamente de las actividades del sitio. Una de las visitas más relevantes fue la del primer ministro Lee Soo-Sung quien, unos meses después de la inauguración, aportó fondos para la construcción de la entrada del lugar.
Desde 1998, funciona allí el Museo de la Esclavitud Sexual por el Ejército Japonés que recibe especialmente a escolares y estudiantes. Muchos de los visitantes realizan tareas de mantenimiento y limpieza de manera voluntaria.








