Memorial ACTe
Museo
Tema: Esclavitud
Dirección
Darboussier 97110
País
Guadalupe (Francia)
Ciudad
Pointe-à-Pitre
Continente
América
Tema: Esclavitud
Objeto de memoria
Conmemorar a las personas que fueron víctimas de la trata y de la esclavitud en las islas del Caribe, y contribuir a la construcción de una memoria universal sobre la trata y la esclavitud.
Nombre conocido
Memorial ACTe
Acceso al público
Libre

Descripción del lugar
El Memorial ACTe “Centro Caribeño de expresion y memoria de la trata de humanos y de la esclavitud” se encuentra ubicado en la costa de la isla Guadalupe, en el espacio donde funcionó la antigua fábrica de azúcar Darboussier, la más grande de las Antillas durante el período esclavista.
El memorial consiste en un imponente edificio de forma alargada que mide 240 metros y está recubierto por rejillas plateadas que representan las raíces de las higueras que crecen sobre los edificios abandonados. En la entrada se encuentra el patio central en donde se erige un monumento de metal que representa un árbol gigante, simbolizando las raíces de la sociedad guadalupeña. El museo, situado en el interior del edificio, narra la historia de la esclavitud en las Antillas y en América desde principios del siglo XVII a través de obras de arte, piezas patrimoniales, proyecciones de vídeos, ambientes sonoros y mesas interactivas que dan testimonio de las atrocidades producidas por la esclavitud y la trata de personas.
A inicios del siglo XVII Francia conquistó al archipiélago de Guadalupe, situado en las Antillas del Caribe. Durante los primeros años, el Gobierno francés otorgó la administración del territorio a la Compañía de las Islas de América, que se encargó de repartir las tierras a los colonos franceses para que desarrollaran plantaciones de caña de azúcar, tabaco y cacao. A mediados del siglo XVII, miles de personas fueron trasladadas para ser utilizadas como mano de obra esclava. La producción de caña de azúcar se convirtió en el cultivo predominante en el archipiélago y la población comenzó a crecer a medida que prosperaron las plantaciones.
Entre los años 1759 y 1763, en el marco de la Guerra de los Siete Años, Gran Bretaña ocupó Guadalupe y trasladó a 15.000 personas para trabajar como mano de obra esclava en las plantaciones. En 1763, los franceses recuperaron el control del archipiélago, que se convirtió en un territorio estratégico por su ubicación y por el crecimiento de la producción de caña de azúcar. La economía de las plantaciones, sustentada en la esclavitud, la servidumbre y la explotación de las personas, generaba grandes ganancias para los colonizadores. A medida que crecía la producción de azúcar, se trasladaban más personas esclavizadas que procedían de colonias holandesas y francesas del Caribe o del continente africano. En 1790, habitaban en Guadalupe 90.00 personas esclavizadas que representaban el 85% de la población total de la isla.
En el contexto de la Revolución Francesa de 1789, las noticias de la aprobación de la Declaración de Derechos del Hombre y del Ciudadano generaron revueltas en las Antillas que fueron reprimidas por los gobiernos locales. En este marco, las autoridades republicanas francesas siguieron manteniendo la legalidad de la esclavitud en sus colonias. El 20 de abril de 1793 se inició una rebelión en Guadalupe, cuando centenares de esclavos de varias plantaciones utilizaron las armas que les habían entregado los plantadores monárquicos para luchar contra los republicanos, y mataron a 23 ciudadanos colonos. Posteriormente, el grupo rebelde fue encarcelado y las autoridades republicanas reforzaron la vigilancia en las plantaciones.
A principios de 1794 los británicos volvieron a invadir Guadalupe y en 1802, las tropas del general Richepance, bajo las órdenes de Napoleón Bonaparte, desembarcaron en la isla, recuperaron el control del territorio y mantuvieron el sistema esclavista. La esclavitud fue abolida definitivamente de Guadalupe en el año 1848, cuando la Segunda República francesa aprobó el decreto de abolición de la esclavitud en los territorios franceses y en sus colonias.
Desde 1946, Guadalupe es parte de los departamentos de ultramar franceses. Está gobernada por dos consejos, uno general y otro regional, cuyas autoridades son elegidas por la población guadalupeña.
Desde la década de 1960, se desarrollaron en las Antillas francesas, particularmente en Guadalupe, agrupaciones nacionalistas que realizaron una relectura de la historia de la isla y reivindicaron la memoria de la esclavitud. En 1981, a partir del triunfo del Partido Socialista en las elecciones presidenciales de Francia, el Gobierno comenzó a incorporar la memoria de la esclavitud en la historia oficial. En 1983 aprobó la ley de conmemoración de la abolición de la esclavitud y posteriormente, en 2001, el Senado francés reconoció a la esclavitud como crimen contra la humanidad.
En Guadalupe, el Comité Internacional de los Pueblos Negros (CIPN) reclamó que se construyera un espacio dedicado a la resistencia contra la opresión y a la lucha por la libertad de las personas víctimas de la esclavitud. El 26 de octubre de 2004, el presidente del Consejo Regional de Guadalupe, Victorin Lurel, se comprometió a construir el memorial para contribuir a la preservación de la memoria colectiva sobre la esclavitud y alentar la investigación sobre la trata y el comercio de personas esclavizadas.
En 2005 se conformó un consejo científico, que fue dirigido por el historiador martiniquense Jacques Adélaide-Merlande para materializar la construcción de un espacio que preservara la memoria de la esclavitud. A principios de 2010 se realizó un concurso internacional en el que fueron elegidos cuatro arquitectos de la región que construyeron el predio inspirados en las raíces del “higuero maldito”, un árbol endémico de las Antillas que destruye a los edificios abandonados para luego conservar y proteger sus ruinas. Una de las propuestas del consejo científico que participó en el desarrollo del proyecto fue la de construir un museo que combinara expresiones de arte contemporáneo con objetos patrimoniales y creara un espacio de múltiples actividades, expresiones y enfoques que diera cuenta de la terrible realidad que significó la esclavitud, contribuyendo a preservar la memoria para construir sociedades más justas.
La construcción del inmenso edificio de granito negro comenzó en marzo de 2013 y contó con la participación de arquitectos/as, escenógrafos/as, historiadores/as y artistas. El edificio fue recubierto con fragmentos de cuarzo negro, en homenaje a millones de personas víctimas de la esclavitud, y está conectado con un gran jardín que fue pensado como un espacio de meditación a la vez que simboliza al jardín del esclavo, el único espacio de libertad que se le concedía los domingos. El memorial fue inaugurado el 10 de mayo de 2015 y contó con la presencia de los presidentes de Francia, Haití, Benín, Senegal y Mali.
Las exposiciones permanentes del museo exhiben la historia de la esclavitud desde una perspectiva internacional, narrando los principales momentos históricos de la trata y de la esclavitud en las Antillas y en el mundo, desde el siglo XVII hasta la actualidad. Esta área de exposiciones comprende un espacio de 1.700 m2 que incluye seis salas en donde se relata, a través de imágenes, proyecciones, expresiones artísticas, piezas patrimoniales y obras contemporáneas, las diferentes etapas que atravesó la esclavitud.
Las exposiciones temporales se exhiben en una sala de 700 m2, en donde se realizan diferentes muestras y actividades sobre la trata y la esclavitud. Además, las obras de arte contemporáneo ocupan un lugar central en el museo e invitan a reflexionar sobre las distintas manifestaciones del racismo.
El espacio cuenta con una sala de teatro, un centro de investigaciones, un fondo de archivos públicos y privados, y un centro de documentación abierto al público.


