Al estrechar el vínculo de la ciencia con la sociedad, el Día Mundial de la Ciencia para la Paz y el Desarrollo tiene como objetivo garantizar que la ciudadanía esté informada sobre los avances en la ciencia.

Celebrado cada 10 de noviembre, el Día Mundial de la Ciencia para la Paz y el Desarrollo destaca el importante papel de la ciencia en la sociedad, y la necesidad de involucrar a diversas audiencias en los debates sobre temas científicos emergentes. También subraya la importancia y relevancia de la ciencia en nuestra vida cotidiana.

Este día ofrece la oportunidad de movilizar a todos los actores en torno al tema de la ciencia para la paz y el desarrollo: desde funcionarios/as gubernamentales hasta los medios de comunicación y estudiantes. Desde UNESCO se anima encarecidamente a unirse a la celebración.

Es imprescindible que cada Estado contribuya a generar políticas públicas que aseguren y promuevan más ciencia básica para alcanzar la Agenda 2030 y sus 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible dado que se observa que el porcentaje del gasto nacional en investigación dedicado a las ciencias básicas varía mucho de un país a otro. En efecto, según datos del Informe sobre la Ciencia de UNESCO para 86 países, algunos dedican menos del 10% de su gasto en investigación a las ciencias básicas y otros más del 30%. Estas diferencias proporcionales son directamente vinculantes con el compromiso que cada gobierno le da o le resta prioridad en sus respectivos países.

En un mundo donde los avances tecnológicos son cada vez mayores y en donde las consecuencias del cambio climático generan verdaderas complicaciones para la vida, es preciso asegurar el desarrollo de las futuras generaciones con innovación sustentable y recursos renovables.

La inversión en ciencias básicas es beneficioso tanto para los países desarrollados como para los que están en vías de desarrollo, dado su potencial para fomentar el desarrollo sostenible y elevar el nivel de vida de las personas.

Observamos este día con la importancia que ello implica. Celebremos a la ciencia como herramienta clave para la paz y el desarrollo.